Biblia cristiana > Nuevo Testamento > EpÃstolas > Hechos > El naufragio (44:27:39 - 44:27:44)
Cuando se hizo de dÃa, no reconocÃan la tierra; pero distinguÃan una bahÃa que tenÃa playa, en la cual, de ser posible, se proponÃan varar la nave.
Cortaron las anclas y las dejaron en el mar. A la vez, soltaron las amarras del timón, izaron al viento la vela de proa e iban rumbo a la playa.
Pero al dar en un banco de arena entre dos corrientes, hicieron encallar la nave. Al enclavarse la proa, quedó inmóvil, mientras la popa se abrÃa por la violencia de las olas.
Entonces los soldados acordaron matar a los presos, para que ninguno se escapara nadando;
pero el centurión, queriendo librar a Pablo, frustró su intento. Mandó a los que podÃan nadar que fueran los primeros en echarse para salir a tierra;
y a los demás, unos en tablas, y otros en objetos de la nave. Asà sucedió que todos llegaron salvos a tierra.
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15-04-2010 a las 20:26
Me complace muchÃsmo esta página, me hacÃa mucha falta y también para tantas personas que andan a la deriva, no hay nada más fortificante que pensar en lo grande que fue nuestro señor Jesus, el cual nos dejo un legado de enseñanzas que si las practicaramos serÃamos muy felices todos, doy gracias a él por todo lo que soy y entrego a el todo mi ser.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espiritu Santo, Amén
[contesta a José Nicolás Sánchez Moscoso]