El extracto sobre la interpretación de la Dra. Marina Beatriz Gómez Prieto hace de la homosexualidad, desafortunadamente bajo un cuestionable cariz religioso y eso basta para desechar su discurso, enfocado en ver la homosexualidad como una anomalía que necesita del cuidado medico y la misericordia religiosa, pero la verdad es que el supuesto conflicto que ella a advertido que algunos homosexuales sufren, se debe exclusivamente por encontrarse sumidos en doctrinas religiosas que tratan a la homosexualidad como un resfrió moral influenciado por el diablo.
La supina ignorancia aunada a la mínima auto valencia como individuo, hace al ser humano presa de habilidosos recaudos inmorales, que con un manto de fe y amor pretenden ayudar en nombre de algún dios de turno.
Como tomar en serio semejante discurso, sabido es que así como la abolida esclavitud, los homosexuales no tienen los mismos derechos que cada ser tiene inalienable sobre este planeta, como es posible que ella considere a un grupo de la sociedad que busca revindicar sus derechos, como desordenados o inadaptados sociales que lo único que buscan como lo llama «hacer bochinche».
Este relato me parece un claro manifiesto para el creyente homosexual, en el podrá entender que la religion es la causa de que su homosexualidad sea un inconveniente para cierto grupo de la sociedad, también se dará cuenta que el único problema de la homosexualidad es la religión, un obra clara de la atrofia social de los grupos religiosos absurdamente enrollados en conceptos médicos o psiquiátricos.
No existe religion alguna que lleve a un ser libre, sentir miedo a sus dioses o castigos.
Señor tu venida esta cerca, danos luz y paciencia hasta ese dia y por sobre todo cubrenos en tu amor para amarte y amarnos el cual cubre multitud de pecados.
Que extraño es el dolor Señor, dicen que purifica a mi me ha cansado, dame mas alas para subir mas alto…..
Encontré una frase interesante sobre la máxima obstrucción que pueden experimentar muchos fundamentalistas cristianos, al intentar debatir en temas de Biblia sin lograr una conexión legítima con sus oyentes.
“Los literalistas Bíblicos son personas que saben la verdad absolutamente, no son capaces de tener una conversación, solo pueden hacer pronunciamientos” Richard Holloway
Es por ello que, no toda la Biblia debe leerse de manera literal. Los debates que se han convertido en obstinadas e imprudencias “conversaciones” están nutridas de poca razón. Eso sí, suelen abundar en desconocimientos contextuales realmente bíblicos, prejuicios generalizados… lo que lleva a peyorativos términos en contra de otras personas, etc. Es decir, el fruto de la mala (aunque en apariencia buena e intencionada) lectura Biblia desconvoca en gravísimas faltas sociales. Y ese no es el propósito de una sana enseñanza. Si a eso le sumamos que los literalistas suelen ignorar múltiples temas de la sexualidad humana, al momento de dar “consejería” solo dejan ver su presunción cristiana, arruinando así una oportunidad de compartir el mensaje.
Por ello miles huyen de las iglesias. En el caso particular de los homosexuales, esto es un hecho bien testificado. A su vez, muchos incautos creen todo lo que se les dice sin pensar o profundizar en las escrituras. Si una persona de por sí con baja autoestima por causa social, su estima pude caer al suele con una predicación literal de los textos bíblicos. Efectivamente, causa dolor, pesar, incertidumbre, odio… y eso no debiese ser es fruto de la palabra de Dios.
La homosexualidad (del griego ὁμο, homo «igual», y del latín sexus «sexo») es una orientación de la sexualidad que se define como la interacción o atracción afectiva, emocional, convivencial y sexual hacia INDIVIDUOS DEL MISMO SEXO. La palabra homosexual es un híbrido del griego homós (que en realidad significa «igual» y no deriva, como podría creerse, del sustantivo latino homo, «hombre») y del adjetivo latino sexualis, lo que sugiere un interés y una conducta sentimental y/o sexual entre personas del mismo sexo.
De manera general, el término «gay» se emplea para referirse a los hombres homosexuales. En España se usa también a menudo, en plural, la palabra «gais» y el término «lesbiana» para referirse a las mujeres homosexuales. Desde el año 1973, año en que la Asociación Americana de Psiquiatría eliminó a la homosexualidad del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, la comunidad científica internacional considera que la homosexualidad no es una enfermedad. Posteriormente, en el año 1990, haría lo propio la Organización Mundial de la Salud. Sin embargo, aunque en el mundo occidental la aceptación de la homosexualidad es o tiende a ser mayor, la situación legal, social y cultural de las personas que se autodenominan homosexuales varía mucho de una sociedad a otra y frecuentemente es objeto de polémicas.
Las relaciones sexuales consentidas entre adultos del mismo sexo se encuentran penadas en el ordenamiento jurídico de al menos 75 estados (la mayoría en África y Asia), de los cuales seis prevén la pena de muerte como castigo para estas conductas a nivel nacional (Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos, Irán, Mauritania, Sudán y Yemen). De igual manera, otros dos países tipifican esta pena para la homosexualidad en parte de su territorio (el norte de Nigeria y ciertos sectores de Somalia, todos lugares en donde se aplica la sharia). Por otro lado, el matrimonio entre personas del mismo sexo se encuentra permitido en dieciséis países a nivel nacional (la mayoría en América y Europa) así como en otros tres en parte de su territorio (Estados Unidos, México y el Reino Unido).
El término homosexual fue empleado por primera vez en 1869 por Karl-Maria Kertbeny,6 7 pero fue el libro Psychopathia Sexualis de Richard Freiherr von Krafft-Ebing el que popularizó el concepto en 1886.7 Desde entonces, la homosexualidad se ha convertido en objeto de intenso debate y estudio: inicialmente se catalogó como una enfermedad, patología o trastorno que había que curar, pero actualmente es ampliamente entendida como parte integral necesaria para comprender la biología, genética, historia, política, psicología y variaciones culturales de las identidades y prácticas sexuales de los seres humanos.
Bendiciones
El Estado esta separado de la iglesia, pero si las personas que ejercen función en ese estado se autoreconocen cristianas no pueden o no deben separarse de la doctrina cristiana.
Por otra parte, si la ley lo permite, los homosexuales están en todo su derecho de casarse, eso creo es indiscutible. Pero si es discutible, que quieran cambiar la doctrina cristiana a su conveniencia. No se puede o al menos no se debe pretender acomodar la doctrina cristiana a las conveniencias de cada grupo humano, sino que ese grupo humano es el que debe acogerse a las reglas de la doctrina cristiana. Así funciona cualquier institución, así funciona cualquier organización ya sea estatal o privada. De lo contrario, si no me gusta como funciona tal o cual organización, nadie me obliga a pertenecer a ella y puedo buscarme otra que se ajuste a mis intereses, eso también es de derecho.
No creó que desdén cambiar una doctrina a su conveniencia. Creo más bien que buscar re-afirmar la doctrina, en un mejor entendimiento de la misma. Históricamente la iglesia cristiana a reformado sus tradiciones de manera progresista según la etica que domina cada época. Por nombrar un ejemplo: En algún momento histórico la iglesia cristiana tenía por doctrina la esclavitud y eso cambio según el conocimiento profundo de la verdadera doctrina. «Que se amen los unos a los otros o que sean un mismo cuerpo etc… » Es una doctrina que luse fiel según el fruto que deja ver de si misma. Si la iglesia comprende que debe hacer una revisión y revaloración de sus tradiciones… eso incluye lo que la Biblia contempla con uniones entre personas. No es fácil buscar o lograr una revisión de valores cuando pesa más la tradición o la denominación o la separación religiosa frente a los valores humanitarios e igualitarios e incluyentes del evangelio de Jesucristo.
El matrimonio exclusivo entre personas del sexo opyesto es una tradición que comenzó – al menos como la conocemos – en el seno de la iglesia romana universal siglos después de cualquier tradición judeo-crustiana. Hoy es un paradigma que comienza a quebrarse solo como tradición e intenta buscar su verdadero dogma. Es una labor estoica y hasta utópica.
Para SdeC:
– Tu comentario: El matrimonio exclusivo entre personas del sexo opyesto es una tradición que comenzó – al menos como la conocemos – en el seno de la iglesia romana universal siglos después de cualquier tradición judeo-crustiana.
– Rpta: Tu si que eres colosal para tergiversar la información. El matrimonio empezó en el paraiso, no en Roma como pretendes hacer creer.
Lo que fue inventado por los romanos es la forma de la ceremonia, eso si viene de la Roma pagana, que las iglesias hoy en día lo practican.
De manera que para tí el matrimonio entre hombre y mujer es solo una tradición, me imagino que sueñas conque en un futuro los matrimonios normales sean entre personas del mismo sexo ¡¡que interante!!. Tal vez también haya matrimonios poligámicos porque eso sí se practicaba en los tiempos bíblicos, tal vez haya matrimonios incestuosos, matrimonio pedofílicos, etc. Total, si todo es en nombre del amor…
No. Es correcto. Me referia totalmente a la ceremonia matrimonial como dogma de la intstitucion religiosa . la unión entre dos personas es algo mucho más íntimo y respetable que requiere de la empatia colosal de los projimos creyentes.
PD: » colosal» me encanto la palabra. Jeje
Saludos.
Mira estimada amiga! No estoy de acuerdo! Que todos esten contra todos! Recuerden que todos estamos aprendiendo! Estoy sacando un doctorando en teologia! Iwal solo lo ago por saber! Y aprender! Nadie puede decir que lo sabe todo! Porque todos aprendemos! Para esocestan las escrituras ingnora! Lo que te dicen los demas, se cree que era homosexual porque en ese tiempo en la region del centurion se acostumbraba a que se podia tener un joven! Pero solo es una teoria! No es parte de ninguna doctrina! Si no se cree que porque primero se llamo! Digno porque era digno! Pero en ese pasasaje aperecen difrentes tipos de digno en el original! El primero quiere decir merecedor! Que es los que los judios dijeron porque les hizo una sinagoga! El segundo viene de (axios) qie se traduce no me tuve por digo! Ni que entraras bajo mi techo ni de venir a ti! Solo es un punto de vista tranquila que no es seguro! Solo es una supocicion! Iwal jesus tu sabes que si fuera asi! Creeme que lo aria dios es amor y escrito esta que da su bendicion a los justos y a los injustos a los ingratos y a pecadores! No les agas caso a los sabelo todo que te contestan mal! Creeme que que no se nececita mucho de saber solo ve lo que hizo jesus! Y veras que seria capas de todo! Sino mira la cruz! Medita en su palabra! Bendiciones!
La supina ignorancia aunada a la mínima auto valencia como individuo, hace al ser humano presa de habilidosos recaudos inmorales, que con un manto de fe y amor pretenden ayudar en nombre de algún dios de turno.
Como tomar en serio semejante discurso, sabido es que así como la abolida esclavitud, los homosexuales no tienen los mismos derechos que cada ser tiene inalienable sobre este planeta, como es posible que ella considere a un grupo de la sociedad que busca revindicar sus derechos, como desordenados o inadaptados sociales que lo único que buscan como lo llama «hacer bochinche».
Este relato me parece un claro manifiesto para el creyente homosexual, en el podrá entender que la religion es la causa de que su homosexualidad sea un inconveniente para cierto grupo de la sociedad, también se dará cuenta que el único problema de la homosexualidad es la religión, un obra clara de la atrofia social de los grupos religiosos absurdamente enrollados en conceptos médicos o psiquiátricos.
No existe religion alguna que lleve a un ser libre, sentir miedo a sus dioses o castigos.
“Los literalistas Bíblicos son personas que saben la verdad absolutamente, no son capaces de tener una conversación, solo pueden hacer pronunciamientos” Richard Holloway
Es por ello que, no toda la Biblia debe leerse de manera literal. Los debates que se han convertido en obstinadas e imprudencias “conversaciones” están nutridas de poca razón. Eso sí, suelen abundar en desconocimientos contextuales realmente bíblicos, prejuicios generalizados… lo que lleva a peyorativos términos en contra de otras personas, etc. Es decir, el fruto de la mala (aunque en apariencia buena e intencionada) lectura Biblia desconvoca en gravísimas faltas sociales. Y ese no es el propósito de una sana enseñanza. Si a eso le sumamos que los literalistas suelen ignorar múltiples temas de la sexualidad humana, al momento de dar “consejería” solo dejan ver su presunción cristiana, arruinando así una oportunidad de compartir el mensaje.
Por ello miles huyen de las iglesias. En el caso particular de los homosexuales, esto es un hecho bien testificado. A su vez, muchos incautos creen todo lo que se les dice sin pensar o profundizar en las escrituras. Si una persona de por sí con baja autoestima por causa social, su estima pude caer al suele con una predicación literal de los textos bíblicos. Efectivamente, causa dolor, pesar, incertidumbre, odio… y eso no debiese ser es fruto de la palabra de Dios.
De manera general, el término «gay» se emplea para referirse a los hombres homosexuales. En España se usa también a menudo, en plural, la palabra «gais» y el término «lesbiana» para referirse a las mujeres homosexuales. Desde el año 1973, año en que la Asociación Americana de Psiquiatría eliminó a la homosexualidad del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, la comunidad científica internacional considera que la homosexualidad no es una enfermedad. Posteriormente, en el año 1990, haría lo propio la Organización Mundial de la Salud. Sin embargo, aunque en el mundo occidental la aceptación de la homosexualidad es o tiende a ser mayor, la situación legal, social y cultural de las personas que se autodenominan homosexuales varía mucho de una sociedad a otra y frecuentemente es objeto de polémicas.
Las relaciones sexuales consentidas entre adultos del mismo sexo se encuentran penadas en el ordenamiento jurídico de al menos 75 estados (la mayoría en África y Asia), de los cuales seis prevén la pena de muerte como castigo para estas conductas a nivel nacional (Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos, Irán, Mauritania, Sudán y Yemen). De igual manera, otros dos países tipifican esta pena para la homosexualidad en parte de su territorio (el norte de Nigeria y ciertos sectores de Somalia, todos lugares en donde se aplica la sharia). Por otro lado, el matrimonio entre personas del mismo sexo se encuentra permitido en dieciséis países a nivel nacional (la mayoría en América y Europa) así como en otros tres en parte de su territorio (Estados Unidos, México y el Reino Unido).
El término homosexual fue empleado por primera vez en 1869 por Karl-Maria Kertbeny,6 7 pero fue el libro Psychopathia Sexualis de Richard Freiherr von Krafft-Ebing el que popularizó el concepto en 1886.7 Desde entonces, la homosexualidad se ha convertido en objeto de intenso debate y estudio: inicialmente se catalogó como una enfermedad, patología o trastorno que había que curar, pero actualmente es ampliamente entendida como parte integral necesaria para comprender la biología, genética, historia, política, psicología y variaciones culturales de las identidades y prácticas sexuales de los seres humanos.
Bendiciones
Por otra parte, si la ley lo permite, los homosexuales están en todo su derecho de casarse, eso creo es indiscutible. Pero si es discutible, que quieran cambiar la doctrina cristiana a su conveniencia. No se puede o al menos no se debe pretender acomodar la doctrina cristiana a las conveniencias de cada grupo humano, sino que ese grupo humano es el que debe acogerse a las reglas de la doctrina cristiana. Así funciona cualquier institución, así funciona cualquier organización ya sea estatal o privada. De lo contrario, si no me gusta como funciona tal o cual organización, nadie me obliga a pertenecer a ella y puedo buscarme otra que se ajuste a mis intereses, eso también es de derecho.
El matrimonio exclusivo entre personas del sexo opyesto es una tradición que comenzó – al menos como la conocemos – en el seno de la iglesia romana universal siglos después de cualquier tradición judeo-crustiana. Hoy es un paradigma que comienza a quebrarse solo como tradición e intenta buscar su verdadero dogma. Es una labor estoica y hasta utópica.
– Tu comentario: El matrimonio exclusivo entre personas del sexo opyesto es una tradición que comenzó – al menos como la conocemos – en el seno de la iglesia romana universal siglos después de cualquier tradición judeo-crustiana.
– Rpta: Tu si que eres colosal para tergiversar la información. El matrimonio empezó en el paraiso, no en Roma como pretendes hacer creer.
Lo que fue inventado por los romanos es la forma de la ceremonia, eso si viene de la Roma pagana, que las iglesias hoy en día lo practican.
De manera que para tí el matrimonio entre hombre y mujer es solo una tradición, me imagino que sueñas conque en un futuro los matrimonios normales sean entre personas del mismo sexo ¡¡que interante!!. Tal vez también haya matrimonios poligámicos porque eso sí se practicaba en los tiempos bíblicos, tal vez haya matrimonios incestuosos, matrimonio pedofílicos, etc. Total, si todo es en nombre del amor…
PD: » colosal» me encanto la palabra. Jeje
Saludos.