Las maravillas del Exodo

Salmos 114:1 – Salmos 114:8

Cuando Israel salió de Egipto, la casa de Jacob de un pueblo extranjero,

Judá fue su santuario, e Israel su señorío.

El mar lo vio y huyó; el Jordán se volvió atrás.

Los montes brincaron como carneros, y las colinas como corderitos.

¿Qué tuviste, oh mar, para que huyeras? ¿Y tú, oh Jordán, para que te volvieras atrás?

Oh montes, ¿por qué brincasteis como carneros; y vosotras, oh colinas, como corderitos?

Ante la presencia del Señor tiembla la tierra; ante la presencia del Dios de Jacob,

quien convirtió la peña en estanque de aguas y el pedernal en manantial de aguas.

Un comentario

  1. Es muy hermoso saber que Dios esta atoda hora con sua hijos y que contamos con èl simpre, èl es mi vida. le devo todo. gracias, por sus refleciones son muy. Agradables, Dios los bendiga.

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