La protección divina. Salmo de David, cuando mudó su semblante delante de Abimelec, y él lo echó, y se fue.
Salmos 34:1 – Salmos 34:22 (Salmo de David, cuando cambió su conducta ante Abimelec, y éste lo echó, y él se fue) Bendeciré a Jehovah en todo tiempo; su alabanza estará siempre en mi boca. En Jehovah se gloriará mi…